La enfermedad de Parkinson es un trastorno cerebral que provoca movimientos involuntarios o descontrolados, como temblores, rigidez y problemas de equilibrio y coordinación.
Los científicos dan el siguiente paso para comprender el papel que desempeña en la enfermedad.
Actualmente no hay terapias modificadoras de la enfermedad para la enfermedad de Parkinson disponibles que puedan alterar el curso de la enfermedad. Investigadores del Campus Médico Anschutz de la Universidad de Colorado están liderando un grupo de expertos de todo el mundo que intentan cambiar eso.
Recientemente, publicaron un nuevo estudio en la revista Brain que lleva a los científicos un paso más cerca de comprender una proteína crucial llamada α-sinucleína (αSyn), que descubrieron que conecta la inflamación y la enfermedad de Parkinson.
La proteína αSyn se expresa principalmente en las neuronas y se ha relacionado con enfermedades neurodegenerativas como la enfermedad de Parkinson y la demencia con cuerpos de Lewy. Este nuevo estudio identifica un nuevo mecanismo que vincula la activación del interferón y la función αSyn en las neuronas como un posible desencadenante del desarrollo de la enfermedad de Parkinson.
“Es fundamental comprender mejor los desencadenantes que contribuyen al desarrollo de la enfermedad de Parkinson y cómo la inflamación puede interactuar con las proteínas que se encuentran en la enfermedad. Con esta información, potencialmente podríamos proporcionar nuevos enfoques para los tratamientos alterando o interfiriendo con estas vías inflamatorias que pueden actuar como desencadenantes de la enfermedad”, dijo David Beckham, MD, profesor asociado en el departamento de enfermedades infecciosas de la Universidad de Colorado. Facultad de Medicina: ubicada en el campus médico de CU Anschutz.
Para investigar el mecanismo de las respuestas inmunitarias inducidas por αSyn a infecciones virales en el cerebro, los investigadores desafiaron a ratones knock-out (KO) αSyn y neuronas dopaminérgicas KO αSyn humanas con[{” attribute=””>RNA virus infection. They discovered that αSyn is required for neuronal expression of interferon-stimulated genes (ISGs). They then found that following any stimulus that triggers interferon signals, a type of immune response, αSyn interacts with signaling proteins in neurons to trigger the expression of ISGs.
This study establishes the first clear link between inflammation and αSyn, a protein connected to the development of Parkinson’s disease.
The scientists state that these findings demonstrate that αSyn responds to infection and inflammatory pathways and that this connection may have a crucial role in the development of Parkinson’s disease. The next critical step is to see whether interactions between interferon and αSyn result in the formation of toxic forms of misfolded αSyn known as fibrils, which have been found in Parkinson’s disease.
The researchers suggest future studies are needed to look into the interactions between type 1 interferon signals in neurons and misfolded αSyn to determine if drugs that inhibit these interactions can prevent the formation of misfolded αSyn. This would result in a potentially disease-modifying therapeutic approach that is needed for patients.
Reference: “Alpha-synuclein supports type 1 interferon signalling in neurons and brain tissue” by Brendan Monogue, Yixi Chen, Hadrian Sparks, Ranya Behbehani, Andrew Chai, Alexander J Rajic, Aaron Massey, B K Kleinschmidt-Demasters, Matthieu Vermeren, Tilo Kunath and J David Beckham, 21 July 2022, Brain.
DOI: 10.1093/brain/awac192